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1197 • CABALGAN DE NUEVO

 

Lunes, 17 de octubre de 2005

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Por el correo electrónico, fechado 4 de octubre 1999, llega una noticia sorprendente en un titular duramente anglotraducido: El embarazo luego del cáncer de mama, no afecta la sobrevida. Más adelante la traducción se allana: la Dra. Priscilla Velentgas, de la Universidad de Washington, y sus colegas de la misma universidad y del centro F. Hutchinson de Investigación del Cáncer de Seattle, EEUU., siguieron durante 22 a 179 meses, de 1983 a 1992 a 618 mujeres de menos de 40 años con cáncer de mama estadío I o II, o sea los casos más favorables gracias a diagnósticos tempranos. Su conclusión fue que "los resultados de nuestro estudio sostienen que el embarazo no tiene efecto adverso sobre la sobrevida luego del (tratamiento del) cáncer de mama..." como informa la Dra. Valentgas en la prestigiosa revista "Cancer" (EEUU) del 1º de junio de 1999.

En una palabra: a las mujeres afectadas que optaban por embarazarse no les iba peor que a las que se abstenían y no tenían hijos siguiendo el consejo médico clásico: ni embarazo, ni píldoras anticonceptivas, ni cremas que pudieran contener hormonas femeninas. Se daba por sentado que esas hormonas eran "incendiarias", pudiendo causar un rebrote de la enfermedad cancerosa. Más aún, hoy se suministran drogas antiestrogénicas, antagonistas de las hormonas femeninas.

Embarazarse, entonces, planteaba un claro desafío, se arriesgaba mucho. ¿Quienes eran estas mujeres, que se atrevieron a desafiar su sino, su horóscopo, su futuro científicamente probable, en una palabra: la aterradora prohibición? El perfil mostró mujeres de más de 35 años, que después de haber conseguido cierta ubicación socioeconómica y estabilizado una pareja, proyectaban su primer embarazo; el que habían venido postergando. En esos momentos es que les llegó el trago amargo del cáncer de mama. Su necesario tratamiento resultó primero en otra postergación; y al final, en el mandato de abandonar el proyecto de ser madres y tener hijos, después de tantos después.

Los resultados del trabajo publicado plantean tener que reelaborar las bases teóricas (el paradigma) del consenso científico actual, confrontado por estos hechos paradojales. Para construir una comprensión más fina del problema de la enfermedad-cáncer y su tratamiento.

Pero más allá de eso, plantea una peripecia vital que conmueve. El embarazo después del cáncer de mama pone un rumbo en la nada, en el aparente no-futuro, y contraría una prohibición poco apelable por un destino adverso.

Como el desastre vaticinado a Colón por emperrarse en navegar hacia el oeste, al más allá de la Mar Océano donde los buques se perdían tragados por el vacío... o como la siniestra amenaza-prohibición de reunirse a las Madres en la Plaza de Mayo para reclamar por sus hijos desaparecidos, en tiempos de la dictadura genocida.

Colón, como es sabido, llegó donde sus sueños, dando pasos "en la nada oficial" tocó tierra el 12 de Octubre; y las Madres de Plaza de Mayo llegaron a constituirse en un símbolo mundial de lealtad y coraje. Como dice el poeta español cantado por Serrat: Golpe a golpe, verso a verso/ caminante ¡no hay camino!... se hace camino al andar.

En el Día de la Madre hoy 17 de octubre de 1999, celebro el coraje de las que, montadas en sus razones y sus deseos, nos abren los ojos, y los caminos, a todos. Y nos muestran que soñar es muy rentable. Solo hay que poner el cuero para conseguir lo soñado... Las amazonas, después del miedo, aún galopan.

AMAZONAS: nombre del río más grande del mundo y de una región de Brasil. Los conquistadores ibéricos lo tomaron de la mitología (¿porqué?) que cuenta de una tribu de mujeres guerreras de a caballo, que se cortaban un pecho para no estorbarse el manejo del arco y las flechas. Se sospecha que los relatores varones le cobraron semejante amputación a las que se mostraron capaces de cabalgar y manejar armas, rasgos tenidos por exclusivamente viriles. Todavía hoy, el tratamiento del cáncer implica la pérdida del seno por la cirugía y la radiación, o al menos el corte y/o destrucción de una porción importante. La Medicina fabrica otras Amazonas.

Otro artículo similar del autor, ver "Una Amazona"

Dr. ERNESTO ROSENBERG
"Después del miedo: las amazonas cabalgan de nuevo" - Mas allá de la salud
Periódico “Siete Lagos” - Villa La Angostura 1999