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1088 • RUTINA DE HUMOR 30 |
Martes, 17 de mayo de 2005 |
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- Oiga tata..., yo quero un reló. - ¿Pa'qué querés un reló, Juanito, pues? ¡en el campo ni falta que hace! - No tata, no... lo quero pa... pa'cuando salgo por las nochecitas con la María, tata. - Pero Juanito, vo conocés los luceros de la noche... vo podé ler la ora alli en ellas. - No tata no... mire, en las nochecitas qu'están reestrelladas, caminamus de la mano... oigo rebién los grillos, oigo como las plantitas si mueven con el viento. La María huele a jabón y yerbas silvestre. Entonce nos sentamo a la oriyita'el rio, tata... La empiezo a besar, la acaricio su carita, di sus hombros, tata... Entonces rodamos por el pasto tata. Quito su ropa, sus enaguas... ¡todito, tata!, ji,ji,ji,ji, nos quidamo desnuditos, tata... y ya cuando la luna ilumina su cuerpo, me subo incima d'eya, la beso en el cueyo y respira fuertote, gime, se queja, jadea y entonces me dice: "¡Damelahora, Juan Damelahora!"... Y yo... sin reló, tata.
El Sr. Soto fue a la consulta del doctor a recoger
los resultados de los análisis de su mujer, y la recepcionista le dice: Refranes actualizados:
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