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872 • DIA DEL AMIGO |
Martes, 20 de julio de 2004 |
Al sitio |
Hoy nos toca decirnos cosas lindas... Aunque
me pregunto que tiene que ver que alguien haya ido a la luna. O a cualquier
otro lado. Si vamos y venimos todos los días corriendo, pensando, soñando,
olvidando, puteando, riendo, matando. Pero hoy es distinto. Tenemos que
decirnos cosas lindas. Y cambiarnos una golosina por un beso. ¿Porqué no se van todos la concha de su madre? Vos no. Yo tampoco. Nuestros amigos y familia menos. Pero sí todos aquellos falsificadores que se olvidaron del amor, de una caricia, de una flor, del respeto, de la sinceridad, de la honestidad, del esfuerzo de sus abuelos, de la magia, de la risa, del llanto honesto, del porque si. Y no digo todos los días. Pero si al menos cada tanto y no una vez al año. O a lo mejor también a mi, a vos, nos cabe el mismo sayo. Porque nosotros también descuidamos, rompemos, retamos, traicionamos, mentimos, nos vamos, quemamos, usurpamos. Porque aunque Valeria Mazza nos quiera convencer de que somos 80% agua perfumada, la verdad es que ese alto porcentaje es, en gran parte, bilis, meo, sudor, colesterol, mocos, llanto, sangre, secreciones, mierda. Un asco. ¿Te imaginaste alguna vez que eso soy yo, tu amigo? Pues me gustaría que a partir de ahora comiences también a verme de esa manera ya que nivelaría la balanza y me (nos) sacaría de encima esa mochila pesada y estúpida que nos pusieron (y a la que nosotros mansa y cómplicemente adherimos) de tener que hacer, cumplir, saber, sonreír, decir, estar no como soy sino como necesito que vos me veas. Pero no de falso sino para no incomodar, ¿vió? Queda tan feo ser humano... Y entonces, de tanto actuar a otro (el que debemos, y por ende, queremos ser), dejamos de ser nosotros. Y así pasa el tiempo y el amigo parece cuasimodo sentado a la mesa de Mirta Legrand. Por eso, mi querido, quiero que desde lo incómodo que representa ser amigo del amor, del respeto, de la bonhomía, de las buenas costumbres, de la originalidad, del saber, de la conciencia, de la inconformidad, de la solidaridad levantemos la copa y brindemos porque a pesar de todos nosotros, esta vida merece ser vivida y siempre nos da otra oportunidad para merecerla, honrarla, disfrutarla, mejorarla, soñarla, construirla, mimarla. Para mí por vos y para vos por los tuyos... Y si entonces, y recién entonces hace falta hacernos una escapada de fin de semana juntos a la luna, hagámoslo humildemente y en silencio no sea cosa de que exista realmente un Dios y nos quiera cagar a trompadas por los desastres que hacemos cotidianamente. Aunque posiblemente nos perdone porque de tal palo, tal astilla. Con amor humano y desde las vísceras, feliz día. Amigo. | |
Colaboración ANGEL SABATINI |