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611 • ANCIANO O VIEJO

 

Sábado, 13 de setiembre de 2003

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  Eres anciano cuando te preguntas si vale la pena; y viejo cuando sin pensar respondes que no.
Eres anciano cuando sueñas; y viejo cuando apenas duermes.
Eres anciano cuando todavía; aprendes y viejo cuando ya no enseñas.
Eres anciano cuando te ejercitas; y viejo cuando sólo descansas.
Eres anciano cuando aún sientes amor; y viejo cuando sólo sientes celos.
Eres anciano cuando hoy es el primer día del resto de tu vida; y viejo cuando cada día parece el último.
Eres anciano cuando tienes mañanas; y viejo cuando sólo tienes ayeres.

El anciano tiene planes, el viejo nostalgias.
El anciano lucha lo que le resta de vida; el viejo sufre lo que resta hasta la muerte.
El anciano tiene sus ojos puestos donde el sol despunta iluminando la esperanza, el viejo apunta su miopía a las sombras del pasado.
El anciano lleva una vida activa, con proyectos y esperanzas. Para él, el tiempo pasa más rápido, y la vejez nunca llega. Para el viejo, sus horas se arrastran, destruidas de todo sentido.
Las arrugas del anciano son bonitas, fueron marcadas por la sonrisa. Las del viejo son feas, fueron marcadas por la amargura.

En definitiva, el anciano y el viejo pueden tener la misma edad cronológica, pero edades diferentes en el corazón.
La edad causa degeneración de las células; la vejez degeneración del espíritu.
Vive una larga vida como anciano, pero nunca te pongas viejo.

Colaboración Erich Cardinal