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Un negro le dice a un blanco:
Amigo mío:
Cuando nacimos tu piel era rosada, la mía
negra.
Cuando crecimos tu piel fue blanca, la mía negra.
Cuando tomamos sol, tu piel se
pone roja, la mía negra.
Cuando tenemos frío, tu piel se ve morada, la mía negra.
Cuando enfermamos, tu piel se ve verde, la mía negra.
Cuando sentimos temor, tu piel se ve amarilla, la mía negra.
Cuando nos toque morir, tu piel se verá gris, la mía negra.
Ahora desgraciado... ¿me podés explicar porqué el de color soy yo?
Un día leí que fumar era malo... dejé de
fumar.
Un día leí que beber era malo... dejé de beber.
Un día leí que fifar era malo... dejé de leer.
Dos aeronautas viajan en globo. Un fuerte
viento les arrastra durante muchas horas, y se pierden. Hacen descender su aerostato en un
campo, y le preguntan a la única persona que encuentran por allí:
- Perdone, buen hombre, ¿dónde nos encontramos?
El lugareño piensa un rato y responde:
- En un globo.
Entonces uno de los aeronautas le dice al otro:
- Vámonos de aquí a preguntarle a
otro, porque éste es un idiota.
- No, hombre, no es idiota. Lo que pasa es que es matemático.
- ¿Matemático?, ¿Y cómo lo
sabes?
- Muy sencillo, porque le hemos hecho una pregunta sencilla, que cualquier persona normal
podría haber respondido inmediata y eficazmente; pero él lo ha pensado largamente, y al
final ha dicho algo totalmente cierto, absolutamente exacto, pero que ya sabíamos, y que
no nos sirve para nada.
- Mamá, mamá... hoy me ahorré
un peso... me vine corriendo atrás del colectivo.
- Hubieras corrido atrás de un taxi, y te ahorrabas 30, estúpido.
Un cubano le dice a un amigo:
- Chico, estoy preocupado, mi esposa se desconcentra y pierde
el interés cada vez que hacemos el amor. Y no sé que hacer compadre.
- ¡Pero chico! -responde el otro- sabes que a mi me pasaba lo mismo con mi mujer, y lo que hice una vez fue
que, cuando estábamos haciendo el amor y noté que estaba perdiendo interés, saqué mi
pistola y eché un tiro al aire. Del susto mi mujer se excitó de nuevo y terminamos
genial. Haz la prueba. Toma, te presto la pistola.
Al día siguiente se encuentran los dos de nuevo.
- Y que, cuéntame como te fué con mi técnica
- Ni me hables -responde el otro apesadumbrado- estábamos haciendo el 69, y cuando vi que mi mujer estaba desanimándose,
saqué la pistola y eché el tiro al aire... bueno... del susto, mi mujer me cagó la
cara, me arrancó un huevo de un mordisco y, para completar, del armario salió un
hijueputa negro desnudo con las manos arriba pidiendo perdón.
El Secretario General de la
Naciones Unidas, le pregunta en forma privada al Secretario de Estado de EE.UU Colin
Powell:
- ¿Que pruebas concretas tiene de que
Irak posee armas de destrucción masiva?
Powell (en voz baja) le responde:
- Conservamos todos los recibos...
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