ANTERIOR | EL CUENTOMETRO DE MORT CINDER |
SIGUIENTE |
305 • TOMAR EN CUENTA |
Sábado, 14 de septiembre de 2002 |
Al índice |
Un hombre
atractivo, de mediana edad, entró en un café y se sentó. Antes de ordenar, no pudo
evitar darse cuenta que un grupo de hombres más jóvenes, que bebían en una mesa cercana
a la suya, se reía de él. No fue hasta recordar que llevaba esa pequeña cinta rosada en
la solapa de su chaqueta, que se percató de qué se trataba la broma. El hombre no le
dio mayor importancia, pero la insistencia de las risas vecinas comenzaron a molestarle.
Miró a uno de los hombres directamente a los ojos, se llevó el dedo a la solapa y
apuntó a la cinta: Con ese gesto todos los hombres en esa mesa se rieron abiertamente. El
hombre al cual dirigió la mirada le dijo: Con toda calma, el hombre hizo un gesto de invitación al bromista para que se acercara y se sentara en su mesa. Aunque se sentía bastante incómodo, el joven se acercó y se sentó. El hombre mayor, con voz muy calma le dijo - Llevo esta cinta para llamar
la atención sobre el Cáncer Mamario. La llevo en honor a mi madre. Incentiva a las mujeres que quieres a practicarse auto-exámenes regulares y a tomarse una mamografía al año. |
|
CLARA
LUNA |