Un hombre susurró:
"Dios, habla conmigo!"
Y un Ruiseñor comenzó a cantar
Pero el hombre no oyó.
El hombre repitió:
"Dios, habla conmigo!"
Y el eco de un Trueno se oyó
Más el hombre fue incapaz de oír.
El hombre miró alrededor y dijo:
"Dios, déjame verte!
Una Estrella brilló en el cielo
Pero el hombre no la vio.
El hombre comenzó a gritar:
"Dios, muéstrame un milagro!"
Un Niño nació
Mas el hombre no sintió el latir de la vida.
El hombre comenzó a llorar y a desesperarse:
"Dios, tócame y déjame saber que estás aquí
conmigo..."
Y una Mariposa se posó suavemente en su hombro
El hombre espantó la mariposa con la mano
y desilusionado continuó su camino, triste, solo y con miedo.
¿ Hasta cuando mantendremos nuestros ojos y
nuestros corazones cerrados,
para los milagros de la vida, que la vida nos presenta en todo momento?