ANTERIOR | EL CUENTOMETRO DE MORT CINDER |
SIGUIENTE |
157 • DOS BREVES |
Jueves, 21 de febrero de 2002 |
Al índice |
En un pueblo Indio, había un muchacho al que llamaban
"el idiota", un visitante extranjero oyó hablar del chico y quiso averiguar el
porqué. Un día de mercado, lo vió, entre un grupito de gente, se acercó y observó.
Alguno de los contertulios, le enseñaban una moneda de 100 dinares en una mano y una de 5
dinares en la otra; le daban a elegir y el muchacho luego de pensarlo, acababa por elegir
la moneda de 5 dinares lo que causaba grandes risotadas a todos. - Ese es el idiota, jajaja. En el afán de reirse del muchacho, le continuaban poniendo monedas, acabando siempre por la risa. El extranjero, indignado con la situación, llamó al muchacho aparte y le dijo: - Pero chico, ¿como consientes tanta burla, risas y que te llamen el idiota? Cuando te ofrezcan las monedas, no seas tonto y elige la de 100 dinares, que tiene 20 veces más valor y evitarás que se burlen de tí. El muchacho contestó: -Señor, yo no soy idiota, si eligiera la moneda de 100 dinares ganaría una vez, pero no provocaría risa ni ese afán de repetir la situación, mientras que eligiendo la de 5, ellos para reirse otra vez, sienten ese afán y acaban por ofrecerme una más. Así he logrado reunir mucho más que 100 dinares. Un cargador de agua tenia dos grandes vasijas que colgaba a
los extremos de un palo que llevaba encima de los hombros. Una de las vasijas tenia varias
grietas, mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo
camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón, pero cuando llegaba, la vasija
rota sólo tenia la mitad del agua. |
|
RABINDRANATH TAGORE |